lunes, 21 de noviembre de 2011

No es de Dios ser asalariada

Hace unos días platicaba con Janus sobre lo que más me puede cuando consigo trabajo luego de unas vacaciones indefinidas.

Me aterra volver a ser esclava de un horario y del tiempo que necesite tomar para poder pedir un permiso para atender algo urgente, como algún compromiso de mi hijo.

Janus ahora está a punto de dejar el mundo de los desempleados y tan solo comentar eso, siento esa pesadumbre por lo que antes les comento.  Me da lástima, pero no su persona, sino mi persona cuando recuerdo cómo me siento cuando firmo contrato en un nuevo trabajo.

Esta semana viví algo patético y me dio mucho coraje  ser asalariada, aunque al mismo tiempo me daba golpes de pecho para que Dios o el destino no se enojara conmigo y me dejara desempleada nuevamente, pero es momento en que sigue dándome un no-sé-qué la situación.

Manotas lleva tres años en el colegio, está en preescolar y hasta ahora no me había perdido nada de las actividades con él en la institución.  Siempre estaba presente cuando era necesario.

El viernes, fue la clausura de la Regioolimpiada y los papás vamos y hacemos algo de ejercicio con los niños.  Los dos años anteriores estuve hasta el final.

Apenas voy a cumplir un mes en el nuevo trabajo y tomando en cuenta que esta semana debo pedir permiso de llegar tarde el miércoles porque voy a recoger sus calificaciones y aprovechan para darnos clase pública, lo cual requiere por lo menos hora y media de mi jornada laboral, pues no podía quedarme en el evento del viernes.

Solo alcancé a bajar con los papás de familia a la cancha, pero tuve qué retirarme a penas iniciaron las competencias de los niños, pues me quedaba el tiempo súper medido para trasladarme a la oficina y no llegar tarde.

Para ponerle sal a la herida, teniendo acceso al Feisbuc todo el día, veía desde un monitor los videos y fotos que las mamás del colegio subían de sus hijos y por más que los veía, buscando encontrar una imagen de “mi hijo abandonado”, no me topaba ni siquiera la sombrita de Manotas.

Los viernes, Juan Pablo sale en un horario que me es imposible pasar por él yo, así que ese día, mi madre se encarga de eso y de la oficina me paso directo a casa para comer juntos.

Llegué y Manotas me mostró orgulloso una medalla de oro que ganó corriendo.  Se me arrugó el corazón porque no lo vi… es su primera medalla en esas competencias y no estuve presente.  Su maestra Rosina, se aventó la tarea de correr de la mano de él y seguramente abrazarlo por su esfuerzo y su logro, mientras la mamá estaba clavando el cuerno en el escritorio.

Todo el fin de semana pensé en ello porque sé que para Manotas fue muy importante.  La prueba está en que no suelta su medalla, la lleva a todos lados y la presume mientras a mí se me vuelve a arrugar el corazón.

Y no quiero pensarlo ni decirlo, pero esta será la primera de muchas cosas que me voy a perder a causa del trabajo.
Este fin de semana fue largo.  Acá en México tuvimos asueto el día de hoy, pero trabajé el sábado en la oficina y en el autódromo y ayer tuve carrera nuevamente de autos.

Hoy me la pasé buscando una batería para mi coche y mientras lo hacía me cayó el 20 de que  por lo menos cuatro fines de semana consecutivos tendré trabajo, del periódico, de las bodas y de las carreras.  Y todo, por el mismo precio, mientras me pierdo de cosas de mi hijo.

En fin… ya descargué mi amargura. 

Y como sé que se solidarizan conmigo, aprovecho para pedirles un voto para Juan Pablo... por favor, dale click a esta palabra y pon Me Gusta... ¡qué lindos!

5 comentarios:

  1. Pues si no puedes ir tu, manda a tu mami en tu lugar !!! bendito sea Dios que cuentas con ella para todo, y pues para que JP no se sienta tan solito en esos momentos importantes, y pues también le puedes encargar a otra mami de tu confianza que le tome fotos durante el evento. ánimo Ele. Diana S.

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  2. Ay Elenita ni modo asi nos tocó a las mamás que trabajamos tampoco te cortes las venas... se que es dificil porque a veces estoy en la misma situación y más cuando uno es nuevo en un trabajo, cuesta pedir permisos pero igual y en unos meses mientras tu desempeño no se afecte te darán los permisos que necesites, tenlo por seguro.
    Y como dice Diana S. cuentas con tu mamá!! yo así hago, siempre mando a mi mamá cuando esta conmigo a todos lados que yo no pueda ir o antes entre Miguel y yo nos turnabamos para los eventos y los permisos y creeme, había niños que sus papás no podían ir por trabajo y los 3 años del kinder solitos en todos los eventos pero yo u otra mami los adoptaba y los atendía como si fueran mios...

    Asi somos...
    Animo y besos!

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  3. ¿Que ondas mí asalariada amiga? Siento mucho que pertenezcas a la clase obrera, en la siguiente vida trata de nacer millonaria o ya de perdido casada con un guey que te apoye, pero no te aflijas tanto, tu vida no esta tan mal como piensas.
    Lastima que estés sola y no haya nadie que te ayude a conseguir una pinche batería para tu carro, apuesto mi vida que andabas en taxi consiguiéndola, es una pena... chingado, este mundo apesta por como es la gente... pero como dicen “los culos no van a la guerra”

    Te dejo un abrazo.

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  4. Cuty... finalmente, tu comentario, que siempre agradezco, vino a hacer explotar la olla de presión en que tengo convertido mi corazón...
    Y no es autocompasión... es dolor de ver la triste realidad.

    Ele y Juan Pa

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  5. Hola! Prima, no te aflijas tanto, pues aunque tuvieras a una pareja, esos compromisos los viene cubriendo uno de mamá y no es el primer niño ni el último, se que quisieramos estar con ellos todo el tiempo, sobre todo porque no podemos, y si pudieramos diríamos que quisieramos trabajar, el ser humano así somos, y las mamas así somos también no queremos perdernos nada, pero no pasa nada cuando no vas, lo mas práctico es que no hubiera ido, pero tampoco se trata de eso, ánimo!!
    Titi

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